El cargar el peso de nuestros propios errores puede ser muy difícil a veces.
Demasiadas cosas dependen de nosotros y, demasiadas responsabilidades compartidas añaden peso a la carga sobre nuestros hombros.
Así que cuando la carga es insoportable y alguien más crítica nuestra conducta o cuestiona nuestros métodos, tendemos a buscar un factor externo al que podamos echarle la culpa, “La verdadera causa del problema”.
Por lo que encontrar un factor externo para justificar nuestros errores, comportamientos, reacciones, etc., es la solución más fácil y sin dolor y, de hecho, ya somos muy buenos en ello.
Es una actividad universal, que todos, de una manera u otra, la usamos a nuestro favor. Pero, ¿resuelve algo?
¿Sabes lo que va a pasar el día que decidas buscar dentro de tu ser la causa de todo, bueno o malo?
¿Cómo vas a reaccionar la próxima vez que algo que te molesta vuelva a pasar? ¿Vas a observar lo que hiciste para aprender que fue lo que hiciste para crearlo? ¿O vas a buscar a la persona más cercana para culparla?
Antes de decirme que tú no eres responsable de la forma en que otras personas se comportan y reaccionan, permíteme que te recuerde que tú eres el que crea tu realidad, todas las situaciones, personas, eventos, problemas o cualquier nombre que desees utilizar para referirte a ellos, todo es tu creación.
Así que, para variar, trata de ver los acontecimientos en tu vida desde esa perspectiva. Prueba para ver si esto te funciona.
Imagina por un momento que tú eres el único creador de tu propio universo. ¿Qué creencias podrían haber creado lo que ahora percibes como tu realidad? ¿Qué nuevas creencias podrían sustituir a las antiguas para que un cambio pudiera darse?
¿Cómo has estado reaccionando a las personas, acontecimientos y situaciones que han causado los mismos resultados una y otra vez en tu vida?
Si no te gustan los viejos resultados, entonces ¿cómo podrías reaccionar la próxima vez que vuelva a suceder lo mismo y qué resultados serán los que deseas en tu realidad?
Juega con estas preguntas y ve cómo aparecen nuevos cambios en tu vida cuando aplicas estas nuevas perspectivas en tu nueva mentalidad.
Sólo al probar cosas nuevas, sabrás lo que funciona y lo que no funciona para ti. Así que en lugar de negar en tu mente lo que es o lo que no es posible, prueba y experimenta en tu propia realidad primero, para que realmente puedas hacer los cambios que necesitas para vivir la vida que te mereces . Hazlo por ti ahora.
Tomado de mi libro: Pensamientos Cuanticos: 300 ideas para cambiar tu vida
