Lo sé, estos han sido tiempos muy difíciles, muchas pruebas, muchas lecciones todavía por aprender, pero si miras ahora hacia atrás, podrás contemplar un largo y abrupto camino detrás de ti.
Si te hubieran dicho que ese camino iba a ser tan accidentado, probablemente habrías elegido un camino diferente. Sin embargo, estás aquí ahora, has transitado esa escabrosa carretera y en este momento te encuentras, más alto, más fuerte, más sabio. ¡Felicitaciones!
Cuando aprendí a patinar por mí mismo, tuve que caer muchas veces, rasparme las rodillas, chocar contra otros patinadores, postes de luz, paredes y muchos otros objetos que encontré en mi camino hacia al dominio del patinaje. Fue un período de aprendizaje muy doloroso, pero valió la pena. Continúe leyendo